martes, 29 de julio de 2008

Creí saberlo, serlo ... pero no era...

Hay una canción moribunda que se cansa de ser entonada, un discurso manoseado ya por manos cochinas. Una prostituta que se cansa de tener las piernas abiertas. Un título auto designado del que todos se vanaglorian.
Si lo tienes eres especial, un loco, un revolucionario. Y ¿qué tiene de irreverente hacerse llamar artistas, si ahora cualquiera de alguna u otra forma dice que lo es?... … ¿qué es llevar como adjetivo al arte?

…Yo… no sé… lo que es… en un momento creí saberlo… pero lo que yo creía no se parecía a lo que los otros decían… y yo no creía que fueran artistas algunos de los que decían que lo eran… entonces ya no supe lo que era en verdad…
Ahora pienso que el arte no es un talento, ni una habilidad, ni una capacidad… Yo creía que tenía un talento, he trabajado con él, sigo creyendo en él, pero mi talento no es el arte, ni yo soy una artista por tenerlo… siento que el arte esta mas arriba de esto, es como el alma de los humanos… todo lo que se es lo que siento… yo no puedo definir la palabra arte… ni decir quien es artista… y quien no lo es… y que no es arte…

El arte es la prostituta mas codiciada y utilizada… pero nadie le ha preguntado quién es… y qué es lo que le pasa.


Marina Wilde.

1 comentario:

discursiva dijo...

Yo siempre he pensado que cuando el hombre o la mujer llega a cuestionarse lo que son o lo que no son están lo suficientemente concientes de sus vida y de lo que quieren hacer con ella y es eso bueno porque son los otros lo que se juran artistas, los que todavía no pueden mirar más allá de su nariz creyendo que lo que hacen es arte y lo peor de todo... nadie les dice que se cambien de oficio...

Besos hermana, yo también quiero verte.